OPINIÓN PÚBLICA
Por Felipe Martínez Chávez
Le hicieron lo que el aire a Juárez
Los cinco años estuvo capoteando señalamientos, demandas, golpes bajos, emboscadas y descalificaciones.
A estas alturas de la tarde, a tres meses para entregar el “changarro” a su hijo, la presidenta de Reynosa, Maki Esther Ortiz Domínguez, debe estar carcajeándose del fracaso de funcionarios de los “vientos del cambio” para someterla o destruirla.
Se las ganó todas, una por una. Al final la decisión fue expulsarla de su partido, el PAN, que le dio la senaduría, diputación federal y doble alcaldía del pueblo.
“Le pelaron los ojos” como dicen en el barrio. Se les fue “vivita” pese a que estuvieron a punto de meter al bote a su cachorro. La querían “doblar” por donde más le duele.
Ya esperaba que la dieran de baja. Debió renunciar para conservar limpio su cárdex de militante.
Para defenderse de la guerra sucia en su contra, promovió amparos contra la Auditoría Superior, controversias constitucionales y juicios de responsabilidad, que le enderezaron hasta por darle chamba a un individuo sancionado por Contraloría años atrás.
Bueno, desde 2016 enfrentó juicios por nombrar a colaboradores que no reunían el requisito de un año de residencia en el municipio. Algunos venían de Nuevo León y Lázara González Aguilar iba de Mainero.
Todavía en marzo del 2021 le mandaron dos exhortos, uno para que rehabilite el alumbrado público y otro exigiéndole donar terreno para construcción de una primaria.
Se le fueron a la yugular. Detuvieron a varios de sus colaboradores y solo faltó Makito.
Perseguido su marido Carlos Peña Garza, acusado por diversos presuntos delitos como trata de personas. Todo intentaron para doblarla y no pudieron, a lo cual debe estar orgullosa.
Hay quienes dicen que la victimizaron ante los ciudadanos, aquellos que no cambiaron de actitud hacia ella y su muchacho ¿qué les hizo? ¿qué discurso inventó? ¿qué les dio? Debe ser la fórmula política del éxito.
En 2018 sus cuatachos de Acción Nacional se la quisieron hacer de tablas, negarle el registro para la reelección. Ganó con 150 mil sufragios, una votación histórica en el municipio, que de seguro no vinieron del “taqueo” porque tenía miles de ojos puestos sobre sus manos.
Gobernó con medio cabildo en contra y cuidando el destino hasta del último centavo, para no recibir la furia de sus enemigos en ciudad Victoria. Es el único municipio que licitó hasta la compra de un lápiz.
Restan tres meses. Solo faltaría que las huestes panistas piensen amargarle el momento más dulce de su éxito en el gobierno: Heredar el trono a su retoño el próximo uno de octubre.
Lo que sí quedó demostrado –pendientes de saber por qué ese amor ciudadano a la doctora- es que no valieron las despensas, reparto de lana, amenazas y otro tipo de violencia en contra de los partidarios de la dama.
Un caso de análisis para los sociólogos y politólogos ¿por qué tanta unión con el pueblo de Reynosa? Los votos fueron para ella y no por el muchacho que no tiene medallas en su haber, ni como regidor.
Don Cachorro Cantú, la jefe pluma azul no publicó los nombres de los expulsados –inician proceso. Tendrá que saber que no todo es para siempre.
Caso concreto el de Ramiro Salazar Rodríguez, el cacique azul de Matamoros, originario de Hualahuises, N. L. y con una ficha por la violación de una mujer, y con otra detención por contrabando en 1989. Fue dos veces diputado local.
En 2010 quedó “expulsado de por vida” del partido y aun así en 2016 llegó al Congreso del Estado por vía plurinominal, o sea de regalo.
Volviendo con la mujerona, será la primera vez en la historia de Tamaulipas que un edil (mujer u hombre) le entrega el poder municipal a su hijo ¿cómo se le acomodaron los factores? No cualquiera.
Para acabar de derrotar a sus enemigos (porque son eso, ya no contrincantes), no está jalado de los pelos lo dicho por disidentes panistas: Que aquellos que la atacaron con saña, van a entregarle la administración estatal en octubre del 2022 como Gobernadora ¿pudiera ser?
No está lejos si la doctora se saca la lotería de abanderar Morena rumbo al gobierno del Estado. Ganar en las urnas será lo más fácil.
En cinco años le hicieron lo que el aire a Juárez. La doña llegó a puerto político seguro.
Jueves de sesión del cabildo de Victoria. A sus integrantes ya les vale gorro asistir a las sesiones. En esta ocasión faltaron nueve, los dos síndicos y siete regidores. Mientras la presidenta “Pili” no ordene que les descuenten, así van a seguir.
Es posible en los siguientes tres meses no alcancen el quórum legal para sesionar.
A la hora de cerrar estas líneas, trascendía la detención en Mc Allen, Texas, de Baltazar Higinio Reséndez Cantú, señalado como cómplice en los expedientes que involucran a Francisco García Cabeza de Vaca. Fue trasladado a México de inmediato por encontrarse allá de forma irregular. De esta forma se ahorran trámites de extradición.
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