CUADRANTE POLÍTICO
Por Fernando Acuña Piñeiro
El gran reto de Morena: ¿Candidato único?
Llegada la fecha de la convocatoria para el registro de la candidatura a gobernador, por ahí de finales de noviembre o inicios de diciembre, se verá si realmente el CEN del Movimiento de Regeneración Nacional tiene control sobre la que se considera uno de los procesos más disputados en la historia política de la entidad.
Lo anterior obedece a las características imperantes con un Congreso local y unas alcaldías que surgieron de un parto político previo y que, por lo tanto, mantienen empoderados tanto a alcaldes como a diputados locales.
La elección del pasado seis de junio, con la reelección de dos alcaldías, el surgimiento de por lo menos tres poderosas alcaldías más, y un Congreso de mayoría guinda, modificó la correlación de fuerzas existentes hasta entonces, trastocando la relativa estabilidad interna prevaleciente.
¿Cuál ha sido la respuesta de las cúpulas morenistas, ante este escenario inédito que, si bien coloca a MORENA prácticamente en la antesala del poder de palacio de Gobierno, también disloca la unidad interna, y amenaza con desembocar en una guerra campal, entre los principales bloques en conflicto…?
A juzgar por los hechos que han desfilado en el escenario del morenismo tamaulipeco, es importante destacar dos tendencias, que aparentemente chocan entre sí, pero también podrían formar parte de una misma estrategia, de retroceder un poco para apretar al final.
La primera expresión fue el apoteótico espaldarazo que se dejó sentir en torno al senador Américo Villarreal Anaya, con motivo de su tercer Informe de labores en esta capital. El líder del senado, el líder nacional del partido, un grupo de senadores, diputados locales, alcaldes electos y en funciones. El saludo desde Palacio Nacional por parte del titular de comunicación social de la Presidencia.
Fue un acto sino definitorio del proceso interno, sí muy contundente, donde bajita la mano los altos mandos morenistas, estaban entregando ya desde ahora, un boleto de finalista al senador de la república. Eso fue lo que ocurrió el seis de septiembre pasado.
Sin embargo, posteriormente todos asistimos a una segunda manifestación, esta última encabezada por el líder nacional de MORENA, Mario Delgado Carrillo, al acudir a Reynosa y alentar las aspiraciones de la alcaldesa Maki Ortiz Domínguez.
Esto último es lo que en parte ha motivado que dos alcaldes como el maderense Adrián Oseguera y el de Matamoros Mario Alberto López hagan alianza y hayan decidido participar de igual manera en el proceso interno por la gubernatura. Ambos, al igual que Maki han dicho que una vez emitida la respectiva convocatoria, se registrarán como precandidatos.
Las aspiraciones de Oseguera y de la Borrega, parecen estar respaldadas de una manera tácita, por la secretaria general del CEN morenista Citlalli Hernández, misma que ha viajado al sur y se ha tomado la foto en las playas de Miramar junto al alcalde AOK, con lo cual envía un mensaje de que, hay personajes encumbrados en la CDMX, que respaldan al presidente Municipal de la urbe turística y petrolera. Ambos alcaldes fundamentan sus aspiraciones en sus poderosas estructuras municipales, que hacen de ellos dos titanes del trabajo territorial.
Junto a este tipo de manifestaciones, este fin de semana surgió un fuerte rumor en el sentido de que el titular de RTC en el país, el sociólogo tampiqueño Rodolfo González Valderrama había renunciado a su cargo para lanzarse ya abiertamente a la campaña por la candidatura a gobernador, dentro de las filas de MORENA.
Sin embargo, dicha versión fue desmentida este fin de semana por el propio Rodolfo, mismo que formuló algunas precisiones a esta columna: Nos dijo: “no he renunciado, hasta ahora me mantengo en el cargo, pero sí voy a renunciar más adelante para participar como aspirante a la gubernatura, solo que lo haré en el tiempo y el momento adecuado, ni antes, ni después”.
A Rodolfo se le considera un hombre serio, y que no se anda con aspavientos. Seguramente que, si llegase a renunciar, sería porque contaría con información fidedigna en el sentido de que ya tiene segura la estafeta. De ahí su frase: “No renunciaré ni antes ni después”.
Fuera de estos que le acabamos de mencionar, no hay ningún otro digno de mencionar, pues nos enteramos que recientemente otro de los aspirantes morenistas como el connotado Manuel Garza González junior, (uno de los ejecutivos corporativos más relevantes del Grupo Salinas Pliego), acaba de bajarse de la competencia interna.
Lo cierto es que, para mostrar solidez ante el cabecismo en la ruta hacia el 2022, MORENA requiere de una candidatura de unidad, la cual rema a contra reloj.
Esperemos que en estos dos meses y medio que nos separan del destape de la candidatura a gobernador en MORENA, las aguas retomen su cauce, y el Comité Ejecutivo Nacional que preside Mario Delgado, logre si no la unidad plena, sí los consensos necesarios para que los del color guinda, arriben al 2022, con todo el power que se requiere.
POSDATA… Otro factor, este de orden nacional que juega en contra de la unidad del morenismo tamaulipeco, es la temprana guerra por la sucesión presidencial. Aunque usted no lo crea, los grupos de la 4T con derecho al papado, ya desde ahora buscan poner gobernadores.
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