CUADRANTE POLÍTICO
Por Fernando Acuña Piñeiro
¿Monrealistas se declaran listos para sumarse a Américo?
Considerado como una de las figuras más relevantes del monrealismo a nivel nacional y particularmente en Tamaulipas, el destacado político, politólogo, escritor y periodista Alejandro Rojas Díaz Durán acaba de enviar un mensaje encriptado que para muchos es el preámbulo de sumarse a la candidatura del senador Américo Villarreal Anaya.
ARDD publicó este jueves que, si no es el candidato de sus preferencias, se declara listo para respaldar el proyecto de la 4T y del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Mi gallo es Rodolfo González Valderrama; pero si no queda, MORENA cuenta conmigo para sacar de los cuernos y del rabo al Gobierno corrupto del PAN”, escribió Alejandro Rojas, como parte de un comunicado fiel a su estilo, y que tan pronto como fue dado a conocer, causó furor especialmente en las filas monrealistas cuyos integrantes, al igual que Rojas se identifican con esta corriente política en el país. Aunque hay que tomar con reserva sus palabras, el hombre suena sincero. Lo cierto es que, con una frase de seis sílabas, este reconocido samurái monrealista está tirando la toalla. Lo hace de una manera digna, como digna lo es también la aportación que hasta ahora ha realizado el delegado de Bienestar, González Valderrama.
Al ser consultados por esta columna, destacados militantes del morenismo tamaulipeco señalaron que las declaraciones de Rojas Díaz Durán no alteran para nada el proceso interno de la candidatura a gobernador, cuyo desenlace, se dice que ya está próximo.
Pero al mismo tiempo reconocieron que expresiones de esta naturaleza, abonan a la unidad del Movimiento de Regeneración Nacional, pero, ante todo, ubican con precisión al panismo- cabecismo como el adversario real, contra el cual los obradoristas lucharán en la elección del 2022.
En nuestra opinión, y atendiendo al sentido de las primeras líneas del comunicado de Rojas, “mi pecho no es bodega”, (una de las frases preferidas de presidente AMLO), un dicho o refrán cuyo significado es que no podemos ni debemos guardarle a alguien un secreto. Y que tenemos la obligación moral de hacerlo público, se entiende que ARDD ya no puede seguir callando que la decisión de la 4T obradorista, no les favorece.
Hasta ahora, Alejandro había sido, por decirlo así, el caballito de batalla del monrealismo que salía de todas todas, a confrontar a los grupos internos del morenismo en nuestro estado, enfundado en su respectiva camiseta facciosa. Esto último era natural, todo el mundo lo hacía, a favor de su “gallo”.
Sin embargo, con su reciente comunicado, Rojas Díaz Durán está sacando la bandera blanca en el contexto de la lucha interna del morenismo, y lo que pide es que le asignen una trinchera para seguir luchando contra el panismo-cabecismo en las cruentas jornadas políticas que se avecinan.
El anticabecismo de Rojas, es su principal activo político. Habrá que ver ahora como se cotiza este estilo personal, de cara a una elección que para muchos será de alto riesgo, dados los niveles de confrontación existentes.
Tal vez, con sus recientes declaraciones, ARDD le está pidiendo al gobierno federal el blindaje literal del cual hasta ahora ha carecido. Su comunicado también se puede interpretar como una manera de seguir apareciendo en la foto MORENA de los próximos capítulos, en la ruta hacia la elección de enfrente. Busca negociar un espacio. Pero, que no se mal entienda: no implora, más bien formula su planteamiento que resulta válido.
Otra lectura un tanto compleja, es que se está deslindando de su propio grupo, aunque esto último es muy remoto, sobre todo cuando, si hay un personaje leal al monrealismo, es él. Sus decisiones siempre han estado en sintonía con lo que piensa Monreal. Siempre han jugado en equipo. Y ahora la decisión de ese team zacatecano, es que acatan la decisión de MORENA y de su máximo líder el presidente. Al menos eso es lo que está diciendo su Consigliere.
Si camina como ganso, y tiene el hígado y las plumas de esa ave palmípeda, entonces no hay duda de que el arroz tamaulipeco ya se coció. En las formas, y bajo los acordes de la Marcha a Zacatecas, el Grupo Monreal se le está cuadrando a AMLO.
Obvio, habrá que estar muy pendientes, porque en política, como en el futbol, los partidos son de 90 minutos. Y en ocasiones, hasta con tiempos extras.
Pero de no suceder otra cosa, todo indica que el cierre de filas del obradorismo-morenismo ya se avecina en Tamaulipas.
Que cada quien agarre su trinchera. Lo que sigue podrían ser declinaciones a favor del bueno.
Así se ve el horizonte guinda.
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