REFLEXIONES 2022.
Por Mtra. Emilia Vela González
Una relación significativa, las elecciones presidenciales del 2006 y el IFE ahora INE
A cuatro años desde que concluyera una responsabilidad jurisdiccional, reconozco una asignatura pendiente, atendiendo a mis proyectos de entonces, me he auto limitado en manifestar opiniones y percepciones acerca del funcionamiento de los distintos niveles de gobierno.
Pensé que al no estar subordinada a ninguna institución pública me daría esa libertad, pero admito que la tibieza mostrada ha obedecido a un deseo de evitar confrontaciones con familiares y amigos con convicciones e intereses distintos a los míos.
El día de ayer, leía una publicación en FB de una querida prima, una defensa apasionada y casi ingenua acerca del gobierno de López Obrador, atacando a los corruptos informadores que hablan mal de este, a la vez que compartía un video que hablaba de sus logros y finalizaba pidiendo no dejarse manipular.
Mi respeto hacia ella y su muro hizo desistirme del comentario que iba realizar, y que aquí hago, que para evitar la manipulación hay que conocer, leer, buscar, recibir y contrastar la información, analizar estadísticas, y verificar la credibilidad de las fuentes.
En ninguno de sus tres intentos de ser Presidente de la República, voté por López Obrador. Aún reconociendo algunos logros de su gobierno, no coincido con su modo de deslegitimar a todas las personas o medios que opinan diferente a él; su manera de polarizar a la población; su concepto de democracia que nos está llevando nuevamente a un partido hegemónico; el poco respeto a la división de poderes y las Instituciones en general, particularmente al INE, que a la fecha constituye uno de los pocos organismos autónomos que constituye un contrapeso al cada vez mayor poder presidencial, sin embargo al contar su partido con la mayoría simple, si bien no puede desaparecerlo si no hay de por medio una reforma constitucional, si puede debilitarlo y disminuir su eficiencia al reducirle el presupuesto.
Pero hagamos un poco de historia, y encontraremos que hay una relación entre el crecimiento del INE antes IFE, con el ahora Presidente de México. Tengo presente lo sucedido en la campaña electoral del 2006, particularmente el promocional del PAN que se dejaba ver y escuchar en los medios de comunicación, “ López Obrador es un peligro para México” así como la poca discreta intervención del Presidente Vicente Fox, descalificando al adversario y dando a conocer sus logros de gobierno en épocas de campaña, y que generó aquella famosa frase de AMLO “ Ya cállate Chachalaca” lo que llevó a la postre a prohibir la propaganda electoral en épocas de campaña.
La escasa diferencia de resultados en la votación entre López Obrador y Felipe Calderón de por un margen de 233 mil 831 votos a favor de éste último (0.58% de diferencia entre ambos) determinó que el proceso electoral, iniciado en octubre de 2005, concluyera el 5 de septiembre de 2006 cuando la Sala Superior del TEPJF emitió el dictamen relativo al cómputo final de la elección presidencial. Determinando la validez de la elección y declarando presidente electo al candidato ganador Felipe Calderón quien tomó posesión el primero de diciembre de 2006. La no aceptación de la derrota llevó a AMLO a ostentarse como Presidente Legítimo, y llevar a cabo grandes movilizaciones son recordadas sus frases “ Al Diablo las Instituciones”.
La experiencia y problemática dejada por el proceso electoral 2005-2006 llevó a plantearse la necesidad para los legisladores y actores políticos, de un cambio en las reglas del juego, contar con árbitros con mayores recursos para vigilar y castigar excesos y una contienda electoral menos dependiente de los medios electrónicos de comunicación. El 14 de noviembre del 2007 entra en vigor la reforma constitucional y el 15 de enero la del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales COFIPE
A partir de entonces, el modelo de comunicación cambia, y se prohíbe a partidos y particulares la adquisición de tiempos en radio y televisión con fines electorales relacionado con la prohibición para concesionarios y permisionarios de dichos medios la contratación de estos, siendo el entonces IFE el único facultado para distribuir y monitorear tiempos del estado en dichos medios, con la finalidad de disminuir la falta de equidad en la contienda. Para tal efecto se creó el Comité de Radio y Televisión, encargado de conocer y aprobar las pautas de trasmisión y realizar monitoreos. Así mismo se autorizó al IFE para recibir quejas y denuncias por infracciones en materia de propaganda electoral en tales medios mediante el procedimiento sancionador.
Por otro lado y para garantizar la veracidad de los resultados, se autorizó a Consejos Distritales del IFE, a realizar recuento total de votos de casillas, cuando la diferencia entre el candidato del primer y segundo lugar sea menor a un punto porcentual promedio. Así mismo para asegurar el manejo transparente de los recursos asignados al IFE se creó el órgano de Control, la Contraloría General, así como la unidad de fiscalización de los recursos de los partidos políticos.
Resulta ilustrativo observar las experiencias electorales que generaron la ampliación de atribuciones del IFE y ahora INE y su relación con nuestro actual presidente.
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