OPINIÓN PÚBLICA
Por Felipe Martínez Chávez
Acto audaz de Maki
CD. VICTORIA, Tamaulipas | En un acto audaz, Maki Ortiz Domínguez, aspirante al Senado por Morena, difundió este lunes una reflexión y virtual catarsis de su vida panista y errores personales que la llevaron a criticar, en su tiempo -2006-, al entonces candidato Andrés Manuel López Obrador.
A través de un mea culpa, con sinceridad, hace ver -era diputada federal- que “no era cierto lo que nos dijeron con la propaganda difamatoria” sobre el hoy presidente.
De frente, sin evadir tema, como pocos políticos lo hacen -hombres y mujeres- responde a las críticas de sus malquerientes que arreciaron a últimas horas, y se “vacuna” para la guerra sucia por venir. El asunto estará como cosa juzgada.
Va por la primera fórmula de la Senaduría. Se registró en tiempo y forma, recorre Tamaulipas y sus partidarios instalaron los primeros panorámicos que hablan de su trayectoria.
Cierto, venía del PAN, como muchos que se adhirieron al movimiento lopezobradorista. Morena se integró con una variada mezcla de filias de las siglas nacionales de entonces.
Después de la desaparecida Laura Alicia Garza Galindo, dos veces senadora e ídem diputada federal, Ortiz es la política más destacada de la época presente. Llegó a crear una corriente dominante en Reynosa, que no pudo vencer Cabeza de Vaca con sus métodos persecutorios.
Menciona una larga reflexión que comienza luego del asesinato de Luis Donaldo Colosio, cuando recién “tenía a mi bebé” (su hijo hoy alcalde), y se dio cuenta que no quería para su vástago “un país como el que estábamos viviendo”. Se afilió al PAN, en una familia priista, algo que “para todos fue en aquel tiempo una locura”.
En 2000 ganó Fox, pero pronto camarillas de colaboradores se apropiaron de los principales cargos y del partido, “olvidando para qué había sido la lucha”. Convirtieron al PAN en un partido “de grupos e intereses personales”.
Dice que, con el tiempo “me di cuenta de que ya el partido tenía un mensaje vacío que no inspiraba y era lejano a todos, pues la mayor aspiración era ya un brutal autoritarismo”.
Pasó por una Subsecretaria de Salud, el Senado y se vino a la tierra que le dio cobijo.
En 20016 ganó la presidencia de Reynosa. Desde el primer momento ella y su familia fueron perseguidos por el Gobernador Cabeza de Vaca -que no lo menciona por su nombre.
-Fui perseguida desde el primer día junto con mi familia por un Gobernador violento y autoritario que me llenó de miedo por su agresividad, ¡persecución, maltrato, denuncias y ordenes de aprehensión!
Hacia el 2018 ganó por segunda vez el ayuntamiento en contra de la decisión cabecista. Al mismo tiempo López Obrador ganaba la Presidencia de México, y vino la identificación y oportunidad de decir adiós al grupo panista.
“Me llené de agradecimiento y admiración al ver la generosidad con la que fui tratada por el presidente al apoyar a Reynosa como nadie”, refiere. Más de 34 proyectos de obras fueron autorizados por la federación, “aun sabiendo que yo venía del PAN, y que a veces inconsciente y a veces sin acordarme lo habíamos difamado”.
Como en el 2000, Maki volvió a reflexionar: Abandonó a los panistas que la habían perseguido y se fue con la 4TT.
Casi al final remata: “El camino en la política es un camino de aprendizaje y muchas veces de volver a lo básico, que no es otra cosa que procurar el bien público para todos y no solo de unos cuantos”.
Sin duda un acto audaz de Ortiz Domínguez. En Tamaulipas pocos varones han recurrido a una “mi culpa” para enfrentar y callar a sus contrincantes.
En manejo de opinión pública y posicionamiento, es una de las estrategias más recomendadas por los operadores demoscópicos. Deja sin armas a los contrarios.
Hizo a un lado la andanada de sus enemigos. Sigue en la puja junto a otras seis mujeres: Nohemí Alemán Hernández, Magaly Deandar Robinson, Raquel Herrera Balleza, Paola López Carreto, Úrsula Patricia Salazar Mojica y Olga Sosa Ruiz.
Como finalistas, ante la encuesta, se perfilan la propia Maki y Olga, una del norte y la otra del sur del territorio estatal. De ahí podría salir la abanderada guinda con todas las posibilidades de ganar.
Hablando de precandidatos, el destino político del alcalde capitalino, Eduardo Gattás Báez parece estar echado. Será candidato a la reelección.
La empresa EC Research manifiesta en sondeo de diciembre, que Gattás goza de las preferencias ciudadanas con un 32.0 por ciento de intención del sufragio, seguido por Jorge Braña Mojica con el 15 y Jorge “Tico” García 14.5 por ciento.
Aunado, en el evento de honores de este lunes, el Gobernador Américo Villarreal le echó más que flores al edil, al mencionar que se hará realidad el acueducto de la presa Vicente Guerrero “que tanto has gestionado y que hemos podido secundar”.
Y destacó los esfuerzos junto a Lalo, ambos, por recuperar y embellecer a la capital para ponerla en el lugar de dignidad y presencia como “la flor consentida” de Tamaulipas. Lalo debe estar muy satisfecho.
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