Caos, daños materiales y cientos de usuarios sin el suministro de energía eléctrica, dejó la tromba que azotó al municipio de Montemorelos y parte de la región citrícola en Nuevo León.
Tal y como estaba pronosticado por la Conagua, durante la tarde el clima en cuestión de minutos dio un cambio radical.
Los habitantes de esa zona se vieron sorprendidos por las fuertes rachas de viento que de inmediato comenzaron a hacer estragos en la zona.
Ante el paso del fenómeno natural de inmediato, árboles y postes sucumbieron ante el fuerte viento.
En algunas viviendas los techos de láminas cedieron y salieron volando ante la mirada de los moradores de las viviendas.
Fue tan grande la magnitud del aire que algunos tinacos que estaban en las casas y parques fueron arrastrados hasta la calle.
Esto ocasiono de inmediato la movilización de los elementos de Protección Civil de los diferentes municipios.
El personal de auxilio se avocó a patrullar las calles de las colonias en donde reportaban los desperfectos.
De acuerdo con las autoridades, las rachas de viento alcanzaron los 60 kilómetros por hora durante 45 minutos.
En Hualahuises se reportó que una tormenta que azotó durante unos 30 minutos dejó destrozos en viviendas, árboles y postes de luz derribados. El Centro del Municipio sería la zona más afectada y se reportan que no hay energía eléctrica en la mayor parte del territorio.
A pesar de la gran dimensión del fenómeno natural hasta el momento la Dirección de Protección Civil no reportó personas lesionadas.
La Conagua alertó a la ciudadanía, porque las precipitaciones se seguirán presentando en los próximos días.
Las rachas de viento también se presentaron en zonas de municipios como Aramberri, Linares, Galeana, Juárez, Guadalupe y Monterrey.
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