Por Jorge Maldonado Díaz
Luego de las recientes lluvias registradas en la región citrícola, el Palacio Municipal de Linares sufrió algunos daños a consecuencia de la humedad.
El edificio que se encuentra protegido por el Instituto Nacional de Antropología e Historia tuvo el desprendimiento de sillar.
Esto ocasionó que autoridades municipales como la secretaria del Ayuntamiento, la dirección de Protección Civil y la Dirección de Servicios Primarios realizaran una inspección de los daños.
Al checar, los funcionarios municipales determinaron que eran afectaciones mínimas las que se presentaron.
Los daños que encontraron se ubicaban en una de las ventanas del Palacio Municipal y en una de las esquinas del inmueble localizado en el centro.
Tras la inspección ocular se dedujo que se cayeron pedazos de las molduras o cornisas del edificio.
Por tal motivo se solicitó apoyo a personal de Obras públicas y se concluyó que no hubo necesidad de desalojar al personal o acordonar el palacio, ya que se consideran solo daños menores.
Luego de la revisión, los funcionarios solicitaron la presencia de trabajadores municipales que se avocaron a la limpieza del material que se desprendió de la parte alta.
Se informó que por los daños que se presentaron será necesario que la parte afectada sea objeto de una rehabilitación.
De esta manera, será en los siguientes días cuando un equipo de ingenieros y arquitectos realicen las maniobras de reparación del edificio de manera especial, ya que se trata de un inmueble histórico que está protegido por el INAH de México.
El palacio municipal es de los más elegantes y vistosos de Nuevo León, pero también cuenta ya con antecedentes de haberse derrumbado el ala norte ante los embates del pasado huracán Alex en el 2010.
El edificio quedó con una gran parte derrumbada, hubo que acordonar la zona para la protección de los peatones.
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