El Gobierno del Estado de Tamaulipas ha decretado la suspensión de clases en todas las escuelas de la región, como medida preventiva ante el impacto inminente de un fenómeno natural en la zona norte del estado.
La Secretaria de Educación, Lucía Aimé Castillo Pastor, explicó que se espera el mayor impacto en las ciudades de Matamoros, Díaz Ordaz y Río Bravo «Tenemos más de un millón de alumnos en el estado, buscamos prevenir cualquier riesgo; inicialmente esperábamos el impacto en el sur del estado, pero ahora sabemos que la mayor cantidad de agua caerá en la zona norte. La postura es poner por encima de todo la integridad de todos los tamaulipecos», señaló.
Para hacer frente a esta situación, se han habilitado 29 albergues en las ciudades de Tampico, Madero y Altamira, aunque las previsiones indican que las lluvias más intensas se concentrarán en la zona norte. Estos albergues están preparados para recibir a los ciudadanos que necesiten refugio durante la contingencia.
La suspensión de clases afectará a todas las instituciones educativas del estado durante los días miércoles y jueves. Esta medida busca garantizar la seguridad de los estudiantes y el personal educativo ante las condiciones climáticas adversas que se avecinan.
Las autoridades estatales recomiendan a la población mantenerse informada a través de los canales oficiales y seguir las indicaciones de Protección Civil. Se insta a los ciudadanos a tomar las precauciones necesarias para protegerse y estar preparados ante cualquier eventualidad que pueda surgir debido a este fenómeno natural.
Esta suspensión de clases es una medida preventiva que refleja el compromiso del Gobierno de Tamaulipas con la seguridad y el bienestar de sus habitantes. Continuaremos informando sobre cualquier actualización relacionada con esta contingencia climática.
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