ESCENARIOS POLITICOS
Por Ernesto Fuentes
El protagonismo senil de Arnulfo; quiere jugar vencidas con la 4T
A finales de los años veinte del siglo pasado, una revolución prostituida bajo el conjuro de las traiciones y las emboscadas, se pinta los labios y baila los danzones de Agustín Lara envuelta por el humo espeso de los cigarrillos.
El sistema político bajo el férreo control de los Generales sonorenses se recrea en los espejos cabareteros donde pulula la letra de una canción que habla de un lirismo vehemente preñado de vaivenes amorosos.
“Vende Caro tu amor, aventurera/ da el precio del dolor a tu pasado….” es el heraldo bohemio de un noctambulismo de rompe y rasga que anuncia el nacimiento de un priismo caciquil y presidencialista, sostenido por una oligarquía política y sindical.
El huevo de la serpiente del charrismo cetemista, que mas adelante encabezaría el “Corleone” gremial Fidel Velázquez, ya se movía en los entretelones de un sistema, hábil en la maniobra para chantajear por arriba, y negociar por abajo.
Originario del ejido el Charco de Villagrán, el actual dirigente sindical de la Sección XXX del SNTE, Arnulfo Rodríguez Treviño, está formado justo en esta cultura de las mañas y la socarronería política, que navega con banderas de patriarca defensor de las bases, pero al final se queda con la mayor parte del pastel.
Se dice admirador de Zapata, pero usa ropa y relojes caros. Durante su primer periodo al frente del SNTE, manejó a placer el banco de la Sección XXX, conocido como SARTET, una institución que hasta ahora se sigue considerando como una de las más tristes exponentes de la opacidad y la ausencia en la rendición de cuentas. ¿Cuánto le redituó a ART, el hecho de hacerse de la vista gorda?
Por otra parte, Arnulfo dice privilegiar el diálogo, pero en su polémica historia del SNTE, figuran violentas tomas del edifico sindical, cuando este se ubicaba a espaldas del Centro Cultural. En su momento , se opuso a la gestión del entonces Secretario de la SET Diódoro Guerra, pero terminó cediendo para su provecho. Igual se recuerda, cuando aparentó darle las contras a la cacique Elba Esther Gordillo, para culminar negociando en lo oscurito.
Hoy el dirigente octagenario de los bigotes alacranados, vuelve a usar el librito de su predecible estrategia, ninguneando a la titular de la SET, Aimé Castillo Pastor, con lo cual, en el fondo, lo que pretende es calar de que está hecho el Gobernador Américo Villarreal Anaya. Sin embargo, sus desplantes de falso profeta de la educación, ya no impresionan a nadie.
Esperemos que Arnulfo y su desgastado modus operandi de tratar de asustar con el petate de las bases, no le resulte contraproducente, porque esta vez, no se está enfrentando a un político emanado del dedazo, sino a un gobernante legitimado por más de 730 mil votos, considerado como el de mayor respaldo ciudadano, en la historia de Tamaulipas.
ART, debe saber que ya no son los tiempos en que, desde un trono sindical, se lograba chantajear y extorsionar al poder en turno. Arnulfo viene de ese viejo sindicalismo charro, formado en el pragmatismo de las cuotas y de la venta de plazas.
Hoy por lo que se observa, Arnulfo busca poner de rodillas al gobierno estatal, para después sacarle todo lo que se pueda, en materia de cargos públicos, sindicales y presupuesto. En su soberbia de dinosaurio alérgico al gis, cree que será fácil, doblar al sexenio de la 4T, por la vía del golpeteo contra la actual titular estatal de la educación.
Esperemos que en su locura de viejo dictador romano del magisterio, este Calígula del bigote almidonado no siga sobrecalentando al “Tigre” educativo en Tamaulipas. Porque, de seguir con sus actitudes de abierta provocación, con el primero que barrerían las bases leales a MORENA y a la Cuarta Transformación, sería con su liderazgo sindical, el cual por cierto, (ya desde ahora se sabe), le saldrá a deber mucho a sus agremiados.
Todo ello porque en su primer periodo, le dieron a ,manos llenas, pero hoy a quienes atenderán será a las bases, pero jamás le rendirán pleitesía a su esclerótica individualidad política. Por lo demás su ridícula y demagógica gira por el estado, no engaña a nadie.
Y esto se debe a que, las maestras y maestros de Tamaulipas, saben que tienen en el gobernador Américo Villarreal a alguien que siempre los ha escuchado y los ha atendido de manera directa. Sin necesidad de protagonismos seniles como el de Arnulfo.
ART, está recorriendo el estado, se toma fotos con los panistas cabecistas que un día trataron de frenar la llegada del morenismo al primer cargo político de Palacio. Igual hace alianzas con la excalcaldesa Maki Ortiz, y busca apapachar a los adversarios del sexenio americanista.
A que le tira, el actual representante de la Sección XXX en Tamaulipas..? ¿Se quiere poner los guantes con Palacio de Gobierno..?
Si el embajador del Charco, no lo cree, que le pregunte a los panistas, que ya han visitado la lona en varias ocasiones.
Concluimos con la frase preferida del Presidente AMLO, para recomendarle al Matusalen de la Sección XXX, ¡serénate, serénate “Político”.
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