Por Dr. Jorge Trujillo Bautista (*)
La región del Noreste Mexicano, como sabemos, la conforman tres entidades federativas: Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas. Su evolución con el paso del tiempo ha sido muy semejante, aunque el Nuevo Santander, hoy Tamaulipas, fuera colonizado 200 años más tarde que el resto de la región, en sentido estricto, su evolución ha sido en términos generales semejante.
No obstante, las dos primeras entidades, se caracterizan por ser industriales y forjadoras del ser emprendedor. Tamaulipas, no lo es tanto. Con capital externo, brinda empleos en maquiladoras y algunos polos industriales en la zona sur y acaso en la ciudad fronteriza de Nuevo Laredo. Su naturaleza ha sido la de servicios.
El día de ayer, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, CONEVAL que por ley mide la pobreza multidimensional en México desde 2004, brindó un detallado informe sobre dichas mediciones. Destacó que tanto Nuevo León como Coahuila son las dos entidades con menos pobreza en el país. Mientras que Tamaulipas, la pobreza ha ido en aumento.
La pobreza es uno de esos fenómenos que no se puede dejar en manos de una administración pública, sino que es la suma de esfuerzos de los diferentes órdenes de gobierno y de la participación de la sociedad en su conjunto. Por alguno de los gobernadores o exgobernadores conociendo los resultados de su política social han emitido mensajes para reconocer el esfuerzo en equipo para lograr una mejor sociedad, tal es el caso de Aristóteles Sandoval ex gobernador de Jalisco. (comunicado en Twiter, publicado en 3:40 p. m. · 5 ago. 2019). Habrá a quienes les gane el orgullo y se cuelguen la medalla solos o quienes buscarán culpables en su administración por no haber cumplido y ahora enfrentar cifras negativas del resultado de su política social. Sin embargo, es tarea de mucha gente y no solo de una dependencia.
¿Qué se observa en Nuevo León? Mucha participación de la sociedad civil y de la iniciativa privada, orientando trabajos hacia los sectores de mayor problema, trabajando con la administración de los gobiernos, municipales y estatal. ¿Qué pasa en Coahuila? La inversión externa se ha incrementado, sus niveles de educación han aumentado de manera importante y su calidad de vida ha subido como la espuma, debido a la suma de factores.
Hay que comprender que la atención de un fenómeno social merece y requiere la atención integral, de otra manera se pierde cualquier tipo de esfuerzo, por bueno que éste sea. Y la pobreza en su medición multidimensional exige un trabajo de este tipo.
¿Qué pasa en Tamaulipas? Hemos comentado líneas arriba sobre la generación de empleo con capital externo, eso brinda trabajo a quien lo requiere, pero no aumenta su capital local. Ante la falta de una iniciativa privada local fuerte, se pierde el interés en contar con mano de obra más calificada. ¿Qué pasa cuando se cuenta con personal más calificado? La producción mejora, las empresas crecen y los trabajadores tienen la aspiración de crecer.
El factor inseguridad ha pegado para todas y cada una de las entidades, sin embargo, cada una de ellas ha sabido enfrentarla desde su trinchera. Y esto también exige un trabajo de conjunto hasta hoy en espera.
En resumen, la política social es una tarea de estado y no de una dependencia gubernamental. Es el resultado de la suma de esfuerzos tanto de gobiernos como de sociedad civil. Los números reflejan un termómetro, son indicadores para poder corregir y con ello mejorar, no ver estas señales es lo mismo que cerrar los ojos, tragar saliva y seguir adelante, pero eso no cumple para lo que hemos sido comprometidos. La misión fundamental del gobierno es mejorar las condiciones de vida de sus gobernados, lo que CONEVAL ha mostrado es una señal del trayecto.
La tabla que a continuación Usted ve, tiene desde luego varias lecturas. Puede leerse en función de las administraciones gubernamentales: ejemplo tipos de gobiernos: panista, priista e independiente. Y encontrará puntos distintos en estos resultados.
Hay que destacar, por ejemplo, que Tamaulipas enfrenta un aumento importante en la pobreza. Mientras que Coahuila disminuye de manera importante. En relación a la pobreza extrema, la relación es peor: Tamaulipas es el único que aumenta su numero de personas que tiene que enfrentar su vida diaria sin ingresos suficientes para comprar una canasta básica alimentaria y tienen, además más de 3 carencias de las 6 que mide CONEVAL.
Los gobiernos de las otras dos entidades del Noreste, disminuyeron su pobreza extrema. En término de los 10 años: tanto Coahuila como Nuevo León disminuyeron su pobreza, el primero en 10 puntos porcentuales y el segundo 7; mientras que Tamaulipas aumentó casi 2 puntos porcentuales. En las últimas dos mediciones se observa 3 puntos de aumento en la pobreza de los tamaulipecos.
Hay otros indicadores llamados “asociados” que es importante considerar para enfrentar una mejora en la política social. Éstos tienen que ver con educación fundamentalmente; coberturas, deserción, absorción; y de calidad educativa: PISA, Excale, Enlace, MCS del INEGI, en fin. Cuando descuidamos el fenómeno educativo, ponemos en riesgo el futuro social. Otros factores importantes son la atención a temprana edad, la disminución en la desigualdad de la atención a mujeres embarazadas del medio rural o del urbano, de mujeres pobres o ricas. Lo importante, al final de cuentas, es considerar las evidencias que existen y tomar un rumbo lo más apegado a lo local.
Si la promesa de CONEVAL se cumple, es decir, contar con un sistema que mida las causas que provocan las carencias sociales se podrá focalizar aún más el reto y orientar adecuadamente la política social. Siempre y cuando se venzan visiones partidistas y de clientelismo político sexenales. Ni los estados lo merecen, ni el país.
(*) Jorge Trujillo, es doctor por la Universidad de Barcelona, España.
Especialista en Política Social de México por la Escuela de Políticas Públicas de la Universidad de Chicago y de la Universidad Iberoamericana de Santa Fe, Ciudad de México.
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