INTRÍNGULIS
Por Juan Carlos López Aceves
2022: La huella del dinero
Los reportes sobre ingreso y gasto que realizan los equipos de campaña, al Instituto Nacional Electoral, permiten saber que, durante abril, ARTURO DIEZ GUTIÉRREZ NAVARRO es el candidato que más le invierte a la propaganda en las redes sociales, para posicionarse entre la ciudadanía.
Así, mientras que CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS ha gastado $98,600 en este medio de comunicación, por $278,600 de AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, el candidato de MC a erogado $4’000,000, representando el 46.5% de su gasto total de campaña, hasta el 30 de abril, que asciende a $8’595,525.
Mientras que, el candidato que más dinero le destina a la propaganda en la vía pública es VERÁSTEGUI OSTOS, con $13’350,933, representando el 56.6% de su gasto total, en tanto que VILLARREAL ANAYA le ha he destinado $3’522,275 y DIEZ GUTIÉRREZ NAVARRO $2’001,040.
Por su parte, la principal erogación de la campaña de VILLARREAL ANAYA, ha sido al rubro de “propaganda”, destinando $7’818,086, que representa el 39.1% del gasto total, mientras que DIEZ GUTIÉRREZ NAVARRO ha erogado $512,060 y VERÁSTEGUI OSTOS le ha invertido $5’015,527.
Esta y más información se encuentra actualizada, disponible y a la vista para consulta, como parte de un ejercicio de transparencia y rendición de cuentas del INE, con la finalidad de conocer el origen y destino del dinero, que utilizan las candidaturas en la disputa por el poder.
Recordando que, esta obligación de rendición de cuentas es una obligación solidaria entre partidos y candidaturas, contemplada por el artículo 445 de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, LEGIPE, en tanto que las sanciones se encuentran en el artículo 456.
Además, los pormenores del procedimiento se desglosan en los 420 artículos del Reglamento de Fiscalización del INE, que además cuenta con una Unidad Técnica y una Comisión que preside el consejero Electoral, JAIME RIVERA VELÁSQUEZ, completando el cuadro que tiene a su cargo, el cumplimiento de la rendición de cuentas y la aplicación de sanciones.
De acuerdo al artículo 445 de la LEGIPE, una de las infracciones que pueden cometer las candidaturas, es precisamente no presentar el informe de gastos de campaña, que de acuerdo con la fracción III del artículo 456, puede ser sancionada con la cancelación de su registro.
Por lo pronto, la plataforma de fiscalización del INE permite a la ciudadanía conocer la huella que va dejando el dinero, que ingresa y se gasta en las tres campañas que diputan la sucesión gubernamental.
CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS: Reporta ingresos por $13’853,232 y un gasto de $23’573,626, arrojando un saldo negativo de $9’720,394, representando la erogación más alta de las tres candidaturas.
De cada 100 pesos que ingresan a la campaña del panista, 98.8 provienen de “transferencias de concentradoras”, mientras que el dinero aportado por el propio VERÁSTEGUI OSTOS, asciende a $148,480.
Respecto a la mezcla de los canales para comunicarse con la ciudadanía, el “TRUKO” ha privilegiado la “propaganda en vía pública”, la “propaganda” y la “utilitaria”, con gastos operativos de $1’889,994.
AMÉRICO VILLARREAL ANAYA: Reporta ingresos totales por $18’369,836 y gastos de $19’979,964, arrojando un saldo negativo de $1’610,128, siendo la candidatura que mejor rendimiento presenta, en la relación del gasto y la intención del voto que cosecha.
De casa 100 pesos que han ingresado a la campaña obradorista, el 91.2% proviene de “transferencias de concentradoras”, mientras que el dinero que el propio candidato a desembolsado, asciende a $196,104.
Siguiendo la huella del dinero, podemos observar que VILLARREAL ANAYA tiene una estrategia de comunicación política, basada en una combinación que incluye “propaganda”, propaganda en “vía pública” y “utilitaria”, siendo sus “gastos operativos” de $5’219,987.
ARTURO DIEZ GUTIÉRREZ NAVARRO: Reporta ingresos por $8’595,525 y gastos por la misma cantidad, siendo el único candidato que tiene un balance en ceros, destacando que, del dinero que entra a su campaña, el 98.5% viene de “transferencias de concentradoras”.
Ahora bien, del total de ingresos, DIEZ GUTIÉRREZ NAVARRO aporta de su propio pecunio, solamente $5,400, mientras que, a la hora de comunicarse con la ciudadanía, el candidato de MC prioriza de la siguiente manera: redes sociales y propaganda en internet, propaganda en vía pública y utilitaria.
Finalmente, tanto ARTURO DIEZ GUTIÉRREZ NAVARO, como AMÉRICO VILLARREAL ANAYA y CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS, reportan al INE un gasto total muy distante del tope de gastos de campaña fijado por el IETAM, que asciende a $147’329,598.
Ya veremos dentro de un mes, al concluir las campañas, quien de ellos tuvo la relación más eficiente, entre sus erogaciones y el número de votantes que los apoyó en las urnas.
Que, hasta el momento, por la preferencia electoral que cosecha, presenta la candidatura de AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, quien además cosecha la mezcla más equilibrada, en su gasto para comunicarse con la ciudadanía.
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