CUADRANTE POLÍTICO
Por Fernando Acuña Piñeiro
Tamaulipas y “El beso de Monreal”
Monreal anda haciendo travesuras políticas en Tamaulipas, y de paso busca arrastrar almas morenistas que lo ayuden en sus aspiraciones presidenciales.
Hablamos de un proyecto que, para muchos, no solo carece de futuro, sino que cifra su apuesta en buscar el debilitamiento del presidente AMLO. Este es su principal estigma. Una defección que, en lugar de desmentirse, cada vez más se confirma.
Ya hay reacciones: por lo pronto, el consenso de la militancia guinda en Tamaulipas, es en el sentido de rechazar en automático a todos aquellos que hayan recibido el llamado “beso de Monreal”.
Lo anterior, es aplicable por analogía a la frase “el beso del chamuco”, cuyo significado es que alguien se portó muy mal, e hizo cosas indebidas. O bien como sinónimo de que, aquellos que reciben esta metafórica caricia, son rechazados por la mayoría. En el caso específico, se habla de apestados políticos.
Y es que, en estos tiempos, apostarle a Monreal, equivale a jugársela en contra de Claudia Sheinbaum y a quemar las naves con dirigentes morenistas como Bertha Luján. De igual forma, una filiación monrealista, es como desmarcarse de Marcelo Ebrard y de Adán Augusto López. Estos tres, hacen equipo en torno a su jefe el presidente. Monreal, en cambio, está haciendo un proselitismo a contracorriente. Por la libre.
Se dice que el líder del senado Ricardo Monreal entró a Tamaulipas por la puerta de atrás, y busca arrastrar a una legión de cuadros rebeldes hacia un proyecto presidencial que, al menos por ahora, no tiene mayores posibilidades.
En su momento el exgobernador zacatecano ha pedido condiciones igualitarias en el proceso de la sucesión obradorista. Pero los hechos en Tamaulipas, hablan de un Monreal que no viene precisamente a honrar este suelo parejo que le está ofreciendo generosamente Mario Delgado desde MORENA, sino más bien llega para crear espacios de división y de confrontación.
Uno de los que le están engordando el caldo a Monreal es el doctor Faustino López, mismo que llegó al senado de la república, gracias a la suplencia que dejó vacante el gobernador constitucional electo de Tamaulipas, el doctor Américo Villarreal Anaya.
Se sabe que desde un inicio, Américo favoreció y apoyo a Faustino, pero este, lejos de corresponderle con afecto y lealtad, como las cabras, siempre ha tirado al monte. En MORENA se ve a Faustino como un incongruente con la transformación política y social que ya se ha puesto en marcha. Esperemos y reflexione, porque FL es una persona valiosa. Pero anda haciendo cosas fuera de la olla.
Bajo esta dinámica, causó extrañeza y cierto rechazo entre la clase política morenista de nuestro estado, el hecho de que Ricardo Monreal visite el sur del estado, y se promueva veladamente en sus aspiraciones, usando como pretexto la presentación de un libro cuyo tema central es: “Las grandes reformas para el cambio de régimen”.
A este evento, el doctor Villarreal Anaya, aunque fuese por cortesía, ni siquiera fue invitado, de manera que dicha reunión se observa como un desplante de deslealtad y de traición en contra del liderazgo de la 4T en Tamaulipas, mismo que ostenta el hoy gobernador constitucional electo.
Aunque la gravedad del asunto, escala hasta el despacho principal de Palacio Nacional, porque el distanciamiento sin retorno que está transitando Monreal, en su confrontación con el Presidente Andrés Manuel López Obrador, lo aleja casi por completo de ser el abanderado presidencial de MORENA. Y al mismo tiempo lo acerca cada vez más a las posiciones neoliberales del PRIAN y del empresario de la ultraderecha Claudio x González.
Desde adentro de la 4T, Monreal ya es visto como el gran saboteador del proyecto obradorista, mismo que ya ha dado muestras de su intención de aliarse con los enemigos de AMLO.
En lo que a Faustino López y compañía se refiere, sus acciones se inscriben dentro de una estrategia de kamikaze político, pues no sabemos a qué le está tirando, desde el momento en que está desafiando al liderazgo del gobernador electo en Tamaulipas. Pero, sobre todo, están pateando el pesebre de la 4T, y de su máximo liderazgo nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador.
—RECONOCE SAMUEL A AVA COMO GOBERNADOR CONSTITUCIONAL ELECTO–
De unos días a la fecha, el doctor Américo Villarreal Anaya se ha estado moviendo de una manera más dinámica en su agenda política.
Así lo acreditan sus reuniones con el secretario de Gobernación Adán Augusto López Hernández y con la titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública federal, Clara Luz Flores Carrales. Anteriormente se reunió con el director general del IMSS Zoe Robledo.
A juzgar por el perfil de sus recientes entrevistas, el doctor AVA está colocando en el espacio de las prioridades de su ya inminente sexenio, los temas de seguridad, gobernabilidad y salud, entre otros.
La reunión más reciente de Américo, se acaba de dar en el Palacio de Gobierno de Nuevo León, donde fue recibido por su homólogo Samuel García como gobernador constitucional electo de Tamaulipas.
En su espacio virtual de historias, el mandatario neolones escribió: “Recibí a gobernador electo de Tamaulipas, Américo Villarreal en Palacio de gobierno. Muchas felicidades por su triunfo, sé que trabajaremos en conjunto, para mejorar la región noreste”.
Fue un recibimiento por demás cordial: Samuel recibe al flamante gobernador tamaulipeco con un efusivo abrazo y la exclamación: ¡Felicidades!
“Ya estamos aquí ahora sí”, le dice el doctor Villarreal Anaya a su anfitrión, y agrega: ¿Dónde quieres que nos sentemos”? “Tus mandas”, le contesta Samuel, en un trato de amigos, que prescinde de los protocolos acartonados y proyecta ya desde ahora una comunicación directa y espontanea que, seguramente será la que prevalecerá en la vecindad de estas dos entidades norestenses.
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