Por Jorge Maldonado Díaz
MONTERREY | Después de un largo periodo de estudio, el Congreso del Estado aprobó finalmente reformas a la Ley Ambiental que prohíbe a las pedreras usar agua potable o potencialmente potable para cualquiera de sus procesos de extracción pétrea.
La Diputada, Ivonne Bustos Paredes, dijo que esto era necesario pues ya no pueden permitir que agua para el consumo humano se siga despreciando.
“Nuevo León es una entidad que sufre permanentemente estrés hídrico, hoy en día lo vemos de manera grave al ver los bajos niveles que tienen nuestras presas, además todo el consenso científico indica que el futuro próximo estará lleno de incertidumbre y escases de agua, no solo en México sino en el mundo, es por ello que el ahorro del líquido en todos los frentes es vital para la sostenibilidad a mediano plazo”.
“Hacer de uso obligatorio de aguas residuales tratadas para los procesos obligatorios destinados a prevenir otros contaminantes en las actividades de explotación y aprovechamiento de materiales no reservados a la Federación», se establece en la reforma”.
“Todos los costos relacionados a cumplir con lo establecido en la presente fracción correrán a cargo de la empresa de extracción pétrea”, indicó.
Bustos Paredes dijo que con ello se garantiza que, ante la problemática de sequía que afecta a Nuevo León, el uso de agua potable sea para consumo humano y que en los procesos de las pedreras se usen aguas tratadas solamente.
De acuerdo a la UNICEF existan 2 mil millones de personas sin acceso a agua potable segura en el planeta. Para entender la magnitud de esta cifra basta con decir que el número representa aproximadamente 15 veces la población total de México.
De acuerdo, con datos de la CONAGUA para el 2050 la demanda de agua potable en Nuevo León superará a la oferta, y en general el planeta experimentará episodios drásticos de estrés hídrico en muchas regiones del mundo.
“Es ante esta situación y ante los desoladores pronósticos científicos que debemos hacer todo lo posible para cuidar el agua, hoy en día Nuevo León es una entidad con sequías recurrentes y muchas veces las comunidades más alejadas de la metrópoli padecen escasez de agua terrible”, señaló.
El dictamen aprobado fue presentado al Pleno por la Comisión de Medio Ambiente con base en una iniciativa presentada por Ivonne Bustos, del PVEM, el 5 de octubre pasado.
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