La otra ópticaOpinión

Del Falso Mesías a los 400 abajo firmantes; la desesperación de la derecha

LA OTRA OPTICA

Por Juan Carlos Flores Turrubiates

Del Falso Mesías a los 400 abajo firmantes; la desesperación de la derecha

A horas de las elecciones intermedias, de las cuales ya se ha hablado en demasía sobre su importancia y trascendencia, hemos sido testigos de una cantidad ya exagerada de textos pseudo periodísticos y una cantidad infame de columnas y artículos de opinión que buscan desesperadamente convencer al electorado (en realidad a ese más del 60 por ciento que apoya la gestión de AMLO) de votar en contra de Morena.

Desde el terrible artículo escrito por un tal Eduardo Caccia, quien, a manera de conectar con el “pueblo”, escribió un artículo en Reforma para que los patrones sepan cómo hablarles a sus subalternos (sic) ; un artículo lleno de condescendiente, de clichés, malas palabras, falsedades y mentiras cuyo fin es que los trabajadores defiendan al patrón de la tiranía del lopezobradorismo.

En el mismo sentido, tuvimos, desde la tierra del otrora Imperio Británico, un artículo o reportaje especial o panfleto propagandístico de mala calidad, eso sí, publicado por la “aclamada” revista The Economist, en cuya portada (para América nada más, por que su portada para Europa fue el conflicto entre Israel y Palestina) presentaban a Andrés Manuel, como “El falso Mesías”.

Una tapa con colores rojos como el color del comunismo –y uno que otro vivo en verde militar–en donde sobresale un imponente AMLO y en cuyo contenido no tuvieron de otra más que reconocer los programas sociales que han ayudado a los más necesitados y la estabilidad en la moneda y la economía a pesar de la situación actual.

Pero, eso sí, llaman a votar en contra del gobierno de corte autoritario, al que comparan con Viktor Orbán, Jair Bolsonaro o Narendra Modi. La revista Inglesa no se limita a pedir el voto contra Morena, le pide abiertamente a Joe Biden que mantenga vigilado a “su patio trasero”, un artículo que está lleno de contradicciones, es injerencista con un discurso colonialista y muy poco ético… en pocas palabras, una vergüenza para un medio tan prestigioso.

Ya por último, tenemos el ejemplo del poeta e intelectual mexicano Gabriel Zaid quien hace un llamado a votar en contra de morena por ser lo que la derecha llama “un peligro para la democracia y las libertades”, así, como firmó su columna en Reforma, el poeta se una la lista de unos 400 académicos, intelectuales, historiadores, opinólogos y periodista, todos ellos, al servicio de la derecha empresarial mexicana encabezada por Gustavo de Hoyos y Claudio X. González.

Entre los abajofirmantes de este desplegado titulado como Manifiesto por la república, la democracia y la libertad, tenemos nombres como el del propio Zaid, Enrique Krauze, Aguilar Camín sin olvidar a Ángeles Mastretta, Roger Bartra, Héctor de Mauleón, Federico Reyes Heroles, Patricia Olamendi, Julio Frenk et al.

Todos estos personajes afirman que no se trata de regresar a “la indeseable situación previa”, pero piden que se les entregue el poder a aquellos responsables “de la indeseable situación previa”. ¿Pero cómo se les ocurre? ¿Acaso este es el nivel de nuestros intelectuales?

La verdad es que la gran mayoría de ellos, han perdido privilegios, específicamente millones y millones de pesos con el que el Estado financiaba todas las publicaciones y revistas como Letras Libres o Nexos, por esto, los intelectuales orgánicos, han buscado cobijo bajo el poder económico de la derecha mexicana que no tiene un proyecto de nación ni una estrategia, ellos mismos lo aceptan, lo único que desean es conservar sus privilegios –entiéndase la evasión fiscal, rescates a empresas en bancarrota y otros préstamos a lo que estaban acostumbrados–.

Ahora, exageran la magnitud de las elecciones intermedias que están a horas de celebrarse, si bien son las más grandes y con mayor participación de la historia de nuestra naciente democracia, debido a las 15 gubernaturas a disputarse y la renovación del congreso, tampoco es sinónimo de que AMLO pueda o incluso le interese un cambio radical que no se pueda revertir en el 2024.

El control de la cámara tampoco nos asegura que todas las decisiones se vayan a votar en automático por parte de Morena y sus aliados, el Verde, PT, PES. Como lo mencionó Zepeda Paterson en su columna Elecciones, mucho ruido y pocas nueces, Morena tiene el objetivo de conseguir la mayoría calificada que le permita hacer cambios constitucionales sin la necesidad de negociar con la oposición, privilegio que no gozaron los anteriores sexenios.

Sin embargo, por más que en el discurso escuchemos sobre una transformación total, las posibilidades de un cambio de fondo son muy pocas. En las naciones de hoy en día, los márgenes que poseen los poderes ejecutivos y legislativos son limitados.

Entonces, lo que buscan todas estas instituciones y personajes conservadores es, más bien, una campaña de descrédito, con el fin de infundir un miedo que no tiene razón de ser. No se han coartado libertades, la moneda está sólida, hay una campaña fuerte desde la SHCP para recaudar todo lo que se evadía, los programas sociales han paliado las necesidades de la población más vulnerable y que solo se les había marginalizado.

En fin, ante la carencia de argumentos sólidos y una verdadera alternativa con rostros presentables, la derecha, por más intelectuales que fiche a base de billetazos, se sabe perdida, y si no… ahí están las encuestas.

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