LA OTRA OPTICA
Por Juan Carlos Flores Turrubiates
¿Quién paga los platos rotos?
Finalmente, el INE multó al gobernador electo por Nuevo León, Samuel García Sepúlveda, al igual que a su partido, Movimiento Ciudadano, por la cantidad de 83 millones de pesos derivado de las triangulaciones financieras por parte de empresas fantasma de la familia del ex Senador para la campaña a la gubernatura y por las aportaciones ilegales en especie de su esposa, la influencer Mariana Rodríguez.
Por un lado, el gobernador calificó de “ridícula” la sanción, y se hizo la víctima de una supuesta persecución, por el otro… Mariana Rodríguez denunció una supuesta censura por parte del INE y hasta interpuso una queja ante la CNDH por “violencia política de género”.
Lo que se les olvida mencionar a ambos personajes es que tanto el nombre y figura de Mariana Rodríguez son una marca registrada ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial para uso en publicidad; gestión de negocios comerciales; administración comercial y trabajos de oficina, desde el 24 de septiembre de 2019 y vence hasta el 2029.
Por lo que sí… Samuel y Mariana son culpables por no haber declarado ese dinero en publicidad y su campaña de victimización y persecución política no les queda.
Ahora bien, tendía que ser muy importante cuestionarnos estas sanciones al gobernador electo por Nuevo León.
Si bien los medios y la mayoría de los espacios de información se enfocaron en el tema de las la relación entre Samuel y Mariana y la multa por la publicidad, no debemos perder de vista el esquema de triangulación financiera y el uso de empresas fachadas por parte de la familia del ex Senador y que benefició a MC.
Resulta que la madre y los hermanos de Samuel organizaron un esquema de triangulación de recursos con empresas con características de fachada, con las que enviaron más de 14 millones de pesos al partido para que después, Movimiento Ciudadano los hiciera pasar por donaciones en especie de supuestos proveedores que quisieron apoyar la campaña, con equivalente a 12.4 millones de pesos según información de medios nacionales.
Vale la pena cuestionarnos si después de todas estas evidencias de esquemas de triangulación y financiamiento ilícito que se cometió con tal de ganar la Gubernatura por el Estado de Nuevo León.
¿Una multa por menos de 100 millones de pesos son suficientes para reparar el daño; ¿Cabría la posibilidad de haber anulado la elección?; ¿Esta es la clase de campañas y de representantes que Nuevo León merece?
Hoy Samuel y Mariana se burlan de la multa impuesta por la autoridad electoral mientras disfrutan de unos días en la playa, y no es para menos.
Al final, ese dinero no los pagará ni Samuel, ni Mariana, los pagará el Movimiento Naranja y ¿cómo lo hará?…
Es probable que al partido de Dante Delgado se le descuente ese dinero de los más de 5 mil
millones de pesos que se reparten entre las fuerzas políticas o incluso puede negociar con el INE para pagarlo a cómodas mensualidades.
Al final, todo ese dinero sigue siendo de los mexicanos, quienes seguimos pagando los platos rotos.
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