- Con inversión de $103 millones de pesos, se desazolvaron 553 presas rurales en 23 municipios.
Monterrey, Nuevo León.- Con 553 presas rurales desazolvadas en 23 municipios, la limpieza de 167.8 kilómetros de ríos que surten a presas de almacenamiento de agua para el Área Metropolitana y el histórico desazolve de la Presa de La Boca, que le dio espacio extra para 12,800 pipas de 10 mil litros de agua cada una, el campo de Nuevo León está listo para aprovechar al máximo las intensas lluvias que lleguen al estado.
Marco González, titular de la Secretaría de Desarrollo Regional y Agropecuario, explicó que todos estos son trabajos que se han realizado a la fecha durante el presente Gobierno del Estado, con el objetivo de maximizar el beneficio de las precipitaciones pluviales.
“El campo de Nuevo León está listo para aprovechar al máximo las intensas lluvias que llegan al estado”, expresó.
“Hemos atacado todos los frentes necesarios, tanto para captar lo más posible en las grandes presas de almacenamiento de agua para consumo humano del Área Metropolitana de Monterrey, como para que más de 500 presas en alrededor del mismo número de comunidades y unidades de producción rurales, capten la mayor cantidad posible de líquido para el uso agropecuario”, añadió.
Precisó que con una inversión de más de 103 millones de pesos, durante la presente Administración Estatal se han realizado 52,548 horas máquina de bulldozer para el desazolve de 553 presas rurales.
“Hablamos de limpiar el excedente de azolve en más de medio millar de presas rurales, para que éstas tengan más espacio útil e incrementen su capacidad de captación de agua de lluvias”, precisó.
“Son presas en toda la geografía del estado, en comunidades y unidades de producción agropecuarias, enfocadas, tanto a la agricultura, como a la ganadería”.
El titular de SEDRA agregó que, adicionalmente a esto, en el presente Gobierno del Estado se han limpiado 167.8 kilómetros de los ríos Pilón, Casillas, Pablillo y Camacho, permitiendo que éstos puedan conducir más agua a presas como la Cerro Prieto.
“En éstos ríos, además de la limpieza y desazolve, se realizaron trabajos de canales de estiaje, que consiste en trazar con maquinaria como bulldozers, un canal a lo largo del trazo del río, para facilitar el escurrimiento de agua”, señaló.
“Esto permite que el agua de las lluvias y escurrimientos naturales fluya más rápido hacia las presas y hacia los centros del producción agropecuaria”.
González recalcó que a todo esto debe sumarse el histórico desazolve de la Presa de La Boca.
“Con más de 3,000 horas máquina y en trabajos que nunca se habían realizado desde la creación de este embalse, retiramos más de 164 mil metros cúbicos de azolve y distintos tipos de residuos, en la Presa de La Boca, uno de los principales depósitos de agua potable para el Área Metropolitana de Monterrey.
“Eso le dio a esta presa una capacidad extra de almacenamiento de agua de 128,000 metros cúbicos de líquido, equivalentes a 128 millones de litros y a 12,800 pipas de 10 mil litros de agua cada una”, puntualizó el titular de la Secretaría de Desarrollo Regional y Agropecuario.
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