Es inadmisible que un senador de la república no tenga respeto por las mujeres, dijo la legisladora.
Por Jorge Maldonado Díaz
MONTERREY | Luego del incidente donde se vio involucrado el senador por Nuevo León, Samuel García donde fue catalogado de machista por regañar a su esposa, la diputada Karina Barrón Perales, hizo un llamado a Partidos Políticos y sus integrantes, así como a servidores públicos en general, para que eviten normalizar la Violencia hacia las mujeres.
La también Presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género en el Congreso del Estado explicó que la violencia no solo es física, sino también psicológica y conductas como; celar a la pareja, descalificarla o bromas con tintes sexistas o machistas.
Acciones que están incluidas dentro del “Violentómetro” elaborado por el Instituto Estatal de las Mujeres.
Explicó que en la actualidad en dónde el uso de las redes sociales se extiende a jóvenes y niños, es importante evitar este tipo de conductas que pudieran hacerles pensar que es “normal” cuando en realidad obedecen a una normalización de la Violencia contra las mujeres.
“Es inadmisible que un Senador de la República no tenga respeto por las mujeres. La violencia no es solo física, sino también Psicológica, y se encuentra regulada en la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia es cuando proviene del acto u omisión que trascienda a la integridad emocional o la estabilidad psicológica de la mujer, que causen a la víctima depresión, aislamiento, devaluación de su autoestima e incluso, el suicidio”.
“Celar, descalificar y las bromas son conductas que se encuentran en el violentómetro del Estado el cual fue elaborado por el Instituto Estatal de las Mujeres. Debemos detener la violencia y visibilizarla, lo cual es doblemente exigible cuando se trata de autoridades”, señaló.
La Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) considera como un tipo de violencia hacia las mujeres, la violencia emocional.
“Esto que es una forma de agresión reiterada que, aun cuando no es física afecta a las mujeres y se manifiesta a través de prohibiciones, coacciones, condicionamientos en tu comportamiento y tu forma de vestir, o intimidaciones, humillaciones, burlas, actitudes devaluatorias. Ello provoca en la mujer deterioro y afecta a su personalidad”, dijo.
La diputada dijo que todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias, tienen la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos de conformidad con los principios de universalidad, Interdependencia, Indivisibilidad y progresividad.
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