Por Jorge Maldonado Díaz
MONTERREY | Una iniciativa de reforma a la Ley Estatal de Salud es lo que la bancada del PRI en el Congreso Local propuso para castigar con arresto administrativo a toda persona que ejerza o incite a ejercer actos de violencia en contra del personal de salud.
La diputada Karina Barrón Perales dijo que se trata de una adición al artículo 141 de la mencionada ley todo con el propósito de salvaguardar la integridad física del personal que trabaja en el sector salud.
Al presentar la iniciativa en la Oficialía de Partes del Congreso del Estado, la legisladora local del PRI señaló que el fenómeno de la violencia contra los profesionales de la salud es multifactorial.
“Es necesario salvaguardar los derechos de nuestro personal de salud debemos cuidar el bien más grande en este momento, que es, el personal médico, de nada nos servirá tener equipo e infraestructura hospitalaria suficiente si no se cuenta con personal especializado y de experiencia para enfrentar esta contingencia y evitar un mayor número de muertes”.
“El personal de salud es imprescindible, son el bien más preciado en este momento, las autoridades gubernamentales debemos cumplir la obligación de protegerlos ya que están en la primera línea de riesgo, deben aplicar todos los recursos necesarios para cumplir este objetivo, proveerles de las herramientas necesarias para que su lucha sea más llevadera ante esta crisis mundial”, agregó.
La legisladora lamentó que Nuevo León ocurra violencia y discriminación contra los trabajadores de la salud, como ha sucedido en otros estados de la República, debido a las preocupaciones infundadas por posible contagio de Covid-19.
Por tal motivo propuso reformar el artículo 7 de la Ley para Prevenir y Eliminar la Discriminación de nuestra entidad para adicionar la fracción XXXVIII para evitar actos de discriminación en contra del personal médico.
“Al personal de salud se le discrimina cuando solicitan el servicio de un taxi, alimento o servicio, las consecuencias negativas de esa violencia generalizada repercuten fuertemente en la prestación de los servicios de atención de salud, y pueden dar lugar a deterioro de la calidad de los cuidados dispensados y a decisiones del personal de salud de abandonar las profesiones de atención de salud”.
“El Consejo Nacional para Prevenir y Eliminar la Discriminación (CONAPRED), informó que desde el inicio de la pandemia tan solo del 19 de marzo al 30 de abril se habían recibido 231 quejas relacionadas con actos de discriminación conectados con el nuevo Covid-19; de ese total, 58 de las actas fueron presentadas por médicos, enfermeras y estudiantes de medicina”, añadió.
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