LOS HECHOS
Por José Inés Figueroa Vitela
Rigo, el de Matamoros
El tema de la pandemia nos ha traído muchos contratiempos, trastocando la agenda personal y colectiva, pública y privada de todo mundo.
La mayoría no nos hemos detenido a ver el mensaje de la inédita situación, aun con todo el tiempo que nos ha concedido, para reflexionar, obligándonos a bajarle al ritmo de vida que traíamos.
Los más estamos esperando pase la Pandemia, lleguen las vacunas, se produzcan los medicamentos idóneos o la inmunidad masiva, para regresar a lo que consideramos «lanormalidad», repitiendo, pero sin aceptar en lo íntimo, que ya nada volverá a ser igual.
Esta semana vimos una reyerta en torno de la sede del Sindicato Único de Trabajadores de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, donde un grupo pretendió de manera violenta ejercer presión, apurando la elección interna de un nuevo comité ejecutivo.
El argumento era «los tiempos vencidos».
El tema puede no ser los riesgos de propagación del virus en la manifestación aquella, pero si en un eventual proceso eleccionario; si ni clases presenciales hay para prevenir contagios, cómo se justificará sacar a trabajadores universitariosa votar.
Como esas, muchas otras actividades ordinarias han tenido que modificarse, en espera de mejores tiempos, guardando en su caso aspiraciones legítimas y hasta apetitos insanos, en las primicias del tiempo.
En el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, botón de muestra, el Comité Ejecutivo Nacional ha dispuesto no celebrar elecciones seccionales, hasta que no haya pasado la amenaza de la pandemia.
El riesgo natural generalizado, se multiplica, porque en la reforma laboral aplica el voto directo, universal y secreto, lo que ameritará una multitudinaria -cuan complicada y costosa- movilización, incluidos, por supuesto, los jubilados y pensionados, como parte importante del sindicato.
En Tamaulipas, dentro de la Sección 30 del SNTE hay más de 21 mil extrabajadores de la educación en esa condición, equivalente a un tercio del total de la base sindical y sin detrimento de que la posibilidad de contagio es generalizado, en su caso es de alto riesgo hacia complicaciones de fatales consecuencias.
Aunque ciertamente algún par de extraños han hecho esbozos por apurar la elección, en la escena ha predominado el liderazgo del maestro RIGOBERTO GUEVARA VÁZQUEZ, acompañado de las primicias estatutarias y las disposiciones dela dirigencia nacional.
El matamorense es una rara avis en la escena general y la del sindicalismo.
Un auténtico líder a quien tocó “apechugar” en el viejo sistema, cuando fue desplazado años atrás y salió electo en la transición de la dirigencia nacional, tocándole además, transitar en un nuevo orden gubernamental, estatal y federal, distinto y distante.
Habría que contrastar la situación en que se encuentran otros estados u otros sectores, para dimensionar los alcances de la gestión guevarista en el magisterio tamaulipeco, al menos, entre aquellos que desconocen los avatares de lidiar con estos tiempos y personajes.
Hijo de la cultura del esfuerzo, RIGO conoce y vive las necesidades de las bases sindicales, haciéndolas propias; ha sabido reclamar y reconocer, los pendientes y los logros, de manera puntual, por los trabajadores de la educación y con las instituciones públicas.
En ese liderazgo no ceja en su activismo, en los planteamientos y las gestiones, concentrado en el trabajo, bajo la directriz nacional, con el objetivo claro de encontrar las mejores condiciones y prestaciones para sus representados.
Lo demás no lo distrae; en su tiempo, cuando la pandemia lo permita y lo indique el alto mando, se dará el proceso para larenovación de la dirigencia.
Ni antes, ni después y sobre rieles de armonía y entendimiento; no se descarta, sino más bien es de esperarse, la concreción de una planilla de unidad para el relevo; así se contruyen los auténticos liderazgos productivos.
Y ya no hay muchos de ellos.
En Victoria capital, aunque mucho se esperó y siempre se temió, finalmente la planta maquiladora de piezas automotrices APTIV II, cerró sus puertas, dejando cesantes a 2 mil trabajadores.
Era una de las pocas empleadoras masivas en la capital, fuera de las instituciones públicas y desde que empezó a ser manoseada por los partidos, buscando penetrarla con fines clientelares y de desplazamiento a las estructuras tradicionales, se empezó a dibujar ese riesgo.
Igual como en Xicotencatl cerró el ingenio, dando al traste con la única fuente de empleo y dispersión económica regional del último siglo, tras los insultos, agresiones y amenazas que contra sus ejecutivos enderezó el diputado federal VICENTE VERASTEGUI OSTOS, hermano del Secretario General de Gobierno estatal de nombre CESAR AUGUSTO y los mismos apellidos.
Ya van a acabarse los caciques… porque “ya no habrá qué caciquear”.
Triste consuelo en la crisis, la pobreza, la desesperación y falta de expectativas: al menos esos vientos hediondos ya no han de soplar.
Ya ni el chapulín colorado ha de consolarnos.
El IETAM ordenó quitar de los hogares altamirenses el emblema del corazón con la “CH” en el centro, porque concedió razón al reclamo panista de que con eso, andaba sacando ventaja su excompañero CIRO HERNÁNDEZ ARTEAGA para ganar la próxima alcaldía.
En su sesión de la tarde-noche del lunes, los Consejeros Locales Electorales hicieron unanimidad, además, para votar en contra de las acusaciones contra funcionarios y legisladores panistas, con excepción del diputado federal neolaredense, CHAVA ROSAS, a quien impusieron una sonora “amonestación pública”, por andar haciendo campaña anticipada.
A CIRO, además de la amonestación le dieron tres días para que todas las familias que tienen el emblema del chapulín colorado lo quiten de sus patios.
El exdiputado presidente de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior, en la primera mitad del actual sexenio panista, ahora anda de aspirante en la 4T a la alcaldía porteña y más que la amenaza de convertirse en alcalde, hay a quien preocupa pueda pasar a la calidad de “testigo protegido”.
El Gobernador FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA, expresó sus condolencia a través de redes sociales, ayer, por el lamentable fallecimiento del conocido conductor radiofónico reynosense VICENTE “La Cotorra” DE ANDA VÁZQUEZ (q.e.p.d.)
“Un comunicador que dejará un hueco difícil de llenar en la radio de Reynosa”, dijo, al expresar sus condolencias a familiares, amigos y colegas.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación invalidó -otra vez- diversas disposiciones previstas en las Leyes de Ingresos Municipales del Estado que establecían el cobro por la prestación de servicios de alumbrado público, búsqueda de información y entrega de copias.
Ya antes se habían dado fallos similares en ejercicio pasado; lo que siempre se vio extraño fue que los alcaldes no solicitaron tales cobros, sino que algún diputado ocurrente metió la propuesta “para ayudarlos”.
Con esos amigos, para que quieren enemigos.
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