LOS HECHOS
Por José Inés Figueroa Vitela
AMÉRICO POR LA LIBRE
“Lo reconozco y estoy orgullosa y contenta por su designación; en su momento hará una buena campaña; se de su compromiso, mesura, inteligencia y visión; se lo que quiere para Nuevo Laredo y por lo que está luchando en Tamaulipas”.
La expresión de la alcaldesa de Nuevo Laredo respecto del Senador de la República AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, resume la posición de los simpatizantes tamaulipecos del Movimiento de Regeneración Nacional, que lo enarbola como precandidato a la gubernatura.
“Debemos todos respetar –abundó CARMEN LILIA CANTUROSAS camino del encuentro con el virtual abanderado en Victoria capital-; todos asumimos un compromiso y así es esto, unos ganamos y otros perdemos”, definió, identificando la unidad en torno a ese proyecto.
“Tenemos que alinearnos, trabajar –ante la- oportunidad histórica de ganar, por muchas circunstancias, por el gran trabajo del Presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, y debemos todos seguir su ejemplo de confiabilidad, congruencia, trabajar cerca de la gente y que el movimiento siga creciendo, hacer lo que los ciudadanos quieren, dignificar la política”, dijo e identificó en ello a AMÉRICO.
Al Hotel Las Fuentes de Victoria, llegaron los alcaldes morenistas tamaulipecos, legisladores federales y funcionarios que estaban pidiendo encontrarse con el ganador del proceso interno de selección del candidato para escucharle y hacerle patente la adhesión.
Originalmente se trataba de un encuentro solo con alcaldes, pero algunos de los otros personajes enterados de la reunión se acercaron para igual reivindicar sus convicciones y presentar sus buenos oficios.
No hubo faltas marcadas, porque tampoco hubo pase de lista; el que quiso se acercó y fue bienvenido; los más tienen tiempo de sobra para incorporarse, entre los actores políticos y los “más-más” ni a los mítines irán, pero puntualmente estarán en las urnas para con su voto rechazar lo que no les satisfizo y reafirmar una aspiración por mayores estadios de bienestar, dignidad y decencia.
No fue el “encuentro de la unidad”, como algunos lo denominaron, porque no hay desunión en torno al proyecto superior de aterrizar la Cuarta Transformación en Tamaulipas, en la que el galeno legislador fue identificado en el perfil idóneo para liderarlo.
La excepción que confirma la regla, tiene destino conocido.
“No somos iguales”, ha dicho y repetido el Presidente de la República, cuando han acusado a su movimiento de replicar conductas irregulares, comunes en el viejo régimen prianista.
En el aquí y ahora, más de uno debe tomar nota de la querella enderezada por el Senador AMÉRICO VILLARREAL contra uno de sus asesores en la Cámara Alta, llamado JOSÉ ANTONIO GUZMÁN RENDÓN.
“Usurpación de identidad” es el delito de que lo acusa y los hechos corresponden a la acción de andar hablando en su nombre, para pedir dinero “para la campaña”, sin que hubiera indicación o intención en ese sentido.
Más allá de las sanciones que las autoridades ministeriales impongan, el procedimiento sienta el precedente por aquellos que, de oficiosos, o con aviesas intenciones, pretendieran andar los mismos caminos.
El mensaje también deberá llegar a los pretendidos Mecenas, Mercaderes de la Política, o traficantes de influencias, para que de una vez se enteren que si alguien les llega con la charola extendida, no va de parte del Senador.
“No somos iguales”, volverá a escucharse por estos tiempos.
Como la canción infantil –sumas, restas, multiplica y divides-, “los otros” partidos políticos cierran el año tratando de reinsertarse en la competencia, de cara a la elección estatal del 5 de junio del inminente año.
Aunque la legislación concede hasta el 10 de enero, como plazo para la presentación de los acuerdos de coalición o candidaturas comunes, el PAN, PRI y PRD decidieron no esperarse y ayer tarde registraban su acuerdo ante el IETAM.
Oficialmente, en la boleta irán los emblemas de cada uno de los partidos por separado, aunque llevarán al candidato postulado por el PAN y a cada cual se le contabilizarán los votos que haya obtenido.
Como no se trata de una elección legislativa, los resultados no inciden en el tema de las prerrogativas, así que cada cual “se rascará con sus propias uñas”.
Ya después, si ganan, el acuerdo político no escrito y menos registrado en el convenio de coalición, es que ejercerán un co-gobierno, plural, entre los tres partidos, repartiéndose responsabilidades… ¡y cargos en el gabinete!
RICARDO ANAYA ofreció su mediación para guardar tal compromiso en la caja fuerte de la sede nacional panista, ahí, junto al juramento hecho hace seis años de que CARLOS CANTUROSAS sería primero candidato a Senador y luego a la gubernatura.
En Hidalgo ya el gobernador priísta OMAR FAYAD sacó su veinte de la coalición firmada y el dirigente nacional ALITO MORENO, aseguró en redes que “desde antes estaba entregado al poder” y que “no va a permitir que entregue el estado” a MORENA.
No sé del estado central respecto de MORENA, pero aquí si hay muchas evidencias de que el último gobernador priísta entregó al PAN el poder en bandeja de plata y no solo por su errática y desaseada gestión.
Hoy, aunque influye, no es solo eso lo que pone al PAN en la peor condición de competencia, a la luz de la sucesión estatal
La misma coalición PRI-PAN-PRD, a los ojos de las más recientes encuestas publicadas, le suma poco, nada y en algunos casos hasta le merma, a los partidos participantes en ella.
Si la militancia leal al PRI se mantiene entre el 3 y el 5 por ciento solo, descontando a los priístas que nunca votarían por un candidato de extracción panista, queda en la antesala de su desaparición como partido político.
Hay quienes le han recomendado al PAN precisamente esa medida: desaparecer al PRI para que pueda empezar a crecer y en el futuro poder volver a entrar a la competencia electroral.
¿Y que dicen los priístas?, ¿Están de plano resignados a la desaparición de sus siglas?, ¿van a seguir resignados a migrar como arrimados unos al PAN y otros a MORENA a recoger las boronas que caigan de sus mesas?
La moneda está en el aire.
Hoy el 2 mil 21 termina con su cauda de emociones y retos cumplidos y superados.
No vale decir que “nada podrá ser peor”, porque luego la vida nos sorprende y a decir verdad, lo pasado, bien vivido y disfrutado, a más, agradecido por tantas bendiciones que nos tienen aquí de pié, viendo de frente el futuro.
Por eso vale decir que el 2 mil 21 fue generoso y mejor los será el 2 mil 22.
Que así sea.
Felicidades.
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